Poema dedicado al padre Rubén.
"A un padre campesino"
Alborotada de teros
la campiña te regala
una luz para los ojos
y un repique de campanas.
Caminaste con devoción
al abrigo de la fe
y en cada sonido vibra sentido tu corazón
llamándote a los caminosque para ti quiso Dios.
Y abrazado a ese madero
en el que Cristo murió,
dejaste madre y hermanos
y en otro pago lejano
al amparo del señor
llevas la santa palabra
para que la mente se habrá
buscando paz y perdón.
Curita gaucho te dicen:
y vas arreando una tropa
por un camino de luz,
y a esas almas has de echar
en el corral de la fe.
Para que vivan por siempre
junto a Cristo en el altar.
Mirta Finucci
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